Si tienes un alquiler vacacional que te sirve como ingreso principal o secundario para pagar la hipoteca, aceptar cualquier huésped puede traerte problemas. Aunque la mayoría de ellos seguramente solo quieren pasar unas buenas vacaciones o visitar familiares o amigos, algunos huéspedes pueden usar tu propiedad para hacer fiestas.
Las fiestas no son solo molestas para los vecinos por el alto volumen de la música o las conversaciones, sino que también representan un riesgo para tus activos. Especialmente si hay alcohol o estupefacientes involucrados, las personas pueden, sin querer, romper o deteriorar tus muebles, vajilla o decoración.
Entonces, ¿cómo puedes evitar que tus huéspedes hagan fiestas en tu alquiler vacacional y proteger tu propiedad?
La realidad es que no hay forma de evitar este tipo de situaciones por completo, pero hay maneras de reducir la probabilidad de que esto ocurra. Es por eso que hemos decidido compilarlas todas y presentártelas en este artículo.
La política de fiestas queda a disposición del propietario o gestor de la vivienda y la plataforma de alquiler vacacional, aunque usualmente estas últimas no lo permiten. “Las reuniones molestas están prohibidas, sea cual sea el número de asistentes,” indica la política sobre conductas molestas para la comunidad de Airbnb. Lo mismo ocurre en Vrbo. En ambas penalizan al usuario y le pueden prohibir el acceso a la plataforma si incumple las normas. Además, también pueden sancionar a los anfitriones si hay quejas de la comunidad.
Como ya sabes, es casi imposible evitar al cien por cien que tus huéspedes hagan una fiesta en tu propiedad, pero hay estrategias para reducir las probabilidades de que esto suceda. Entre ellas están:
Es importante que conozcas quién va a quedarse en tu propiedad. Te recomendamos que hagas una evaluación previa de tus huéspedes. Puedes hacerlo de forma manual deshabilitando la opción de reserva inmediata y haciendo preguntas para conocer el motivo de su viaje y qué planean hacer durante su visita. También es importante que revises las reseñas que otros anfitriones han dejado sobre ellos y que verifiques que la persona que va a alojarse en tu propiedad sea la misma que hizo la reserva.
Si quieres automatizar esta evaluación, puedes hacerlo usando una aplicación como Superhog o Autohost y así reducir el porcentaje de malos huéspedes.
No es posible determinar si las personas que hacen reservas de una sola noche son huéspedes que planean hacer fiestas, pero es mejor evitar este tipo de situaciones.
Sin embargo, las reservas de una noche pueden ser bastante rentables, especialmente cuando hay eventos en la ciudad. Por ejemplo, en Ciudad de México, el precio por noche de los alojamientos cercanos al Foro del Sol en el fin de semana en el que se celebró un concierto de Taylor Swift aumentaron entre un 50% y 300%. “Reservar una noche en los lugares mencionados cuesta entre mil quinientos y cuatro mil pesos cuando normalmente sus precios oscilan entre los mil pesos mexicanos,” publicó la Revista Clase.
Volviendo al punto anterior, haciendo una evaluación puedes decidir rechazar reservas de una sola noche a personas locales, grupos grandes o durante festivos donde las probabilidades de hacer fiestas aumentan (por ejemplo, en Navidad, Halloween y día de Reyes).
Pedir un depósito de seguridad a tus huéspedes es otra táctica que puedes utilizar para evitar que hagan fiestas y dañen tu propiedad. Hay plataformas como Airbnb que te permiten solicitar la fianza directamente y devolverla automáticamente hasta 14 días después de la fecha de salida y una vez que hayas revisado que todo esté en orden.
Asegúrate de revisar las leyes locales antes de pedir una fianza y consulta con un experto para calcular el pago de impuestos correctamente en caso de cobrarla.
Y pídeles a los huéspedes confirmación una vez que hayan leído dichas normas. Escribe en la publicación que te reservas el derecho de cancelar reservas en caso de que los huéspedes no aprueben las normas o no las confirmen a tiempo.
Este paso es sumamente importante porque necesitas tener pruebas de que los huéspedes aceptaron no hacer fiestas o eventos en tu propiedad. De esta forma, si violan la norma, puedes defenderte en plataformas como Airbnb o Vrbo, donde, si un vecino o el huésped se queja sobre tu propiedad a través de sus canales, ellos pueden decidir dar de baja tu anuncio.
Los vecinos pueden llegar a verse afectados por tu negocio si los huéspedes que sueles alojar son ruidosos, descuidados o no cumplen con las normas de la comunidad. Por ejemplo, si la puerta del edificio debe cerrarse con llave y tus huéspedes suelen dejarla abierta, este tipo de cosas puede dañar la relación con los vecinos porque pone en riesgo su seguridad.
Por lo tanto, construir una buena relación con tus vecinos y educar a tus huéspedes para que cumplan las normas, hace que sea más fácil identificar si los visitantes están causando problemas. Es decir, si tus vecinos saben que usualmente evalúas a los huéspedes, monitorizas y limitas el ruido que generan, el día que haya una fiesta, ellos serán tus aliados. Tus vecinos pueden tocarles la puerta a los inquilinos y pedirles que bajen el volumen o avisarte de que se está celebrando un evento no autorizado en tu propiedad para que puedas tomar medidas.
Mucho de lo que puedes hacer para evitar fiestas en tu propiedad es recordar una y otra vez que estas no están permitidas. La primera barrera para hacerlo es escribiendo en el anuncio de tu propiedad que los eventos no están permitidos bajo ningún concepto.
Es aquí donde debes indicar si cuentas con cualquier medida de seguridad para evitar estas situaciones. Por ejemplo, si hay una persona de seguridad en la entrada que no permitirá el ingreso de personas que no hayan sido previamente anunciadas, si tienes cámaras de seguridad o algún sistema de monitoreo de ruidos como Minut (hablaremos de esto más abajo).
Si gestionas o tienes múltiples propiedades en la misma zona o edificio, puedes considerar contratar a una persona de seguridad que controle el acceso de huéspedes. Invertir en una persona de seguridad teniendo una sola propiedad no es rentable. Sin embargo, si gestionas varias o te alías con otros propietarios en el edificio o complejo para hacerlo, esto puede ayudarte a reducir el ingreso de personas no deseadas.
Por último, pero no menos importante, apóyate en la tecnología. Es imprescindible un detector de ruido para que puedas monitorizar tus propiedades sin tener que estar en la misma ciudad o siempre con un ojo en los mensajes. Puedes lograr esto con un dispositivo de monitorización de ruido como Minut.
Este dispositivo controla los niveles de ruido, detecta humo de tabaco y te alerta en caso de que alguien viole las normas. Puedes usar esta información para comunicarte con esos viajeros ruidosos y pedirles que bajen el volumen.
Hemos cubierto un poco cuáles son las consecuencias de que se hagan fiestas o eventos en tu alquiler vacacional. Vamos a entrar un poco más en detalle de cuáles son los problemas reales de estas situaciones:
Al ser dueño o gestor de un apartamento o casa vacacional, eres responsable de lo que ocurra allí, incluso cuando no estás. Por eso es tan importante que sepas a quién le alquilas tu propiedad y cuáles son sus planes.
Además de evaluar a los potenciales huéspedes, pedir un depósito de garantía y definir normas claras, usar un dispositivo con sensor de ruido como Minut puede ayudarte a evitar aglomeraciones de gente o ruidos molestos.
El dispositivo de Minut te permite monitorizar los niveles de ruido sin grabar conversaciones o violar la privacidad de tus huéspedes. También te dice cuántas personas hay en la propiedad y avisa sobre la presencia de humo de tabaco. Al instalar este dispositivo, vas a recibir alertas de movimiento o ruido inusual para poder proteger tu propiedad y mantener una buena relación con los vecinos.
El dispositivo es fácil de instalar, no daña la estética de tu propiedad y se conecta rápidamente con la aplicación. Minut son tus ojos y oídos cuando estás lejos para que puedas tener información sobre tus alquileres turísticos y puedas estar en paz sabiendo que vas a poder actuar rápido en caso de que se produzca una violación de las normas.
No te dejes intimidar por la amenaza de las fiestas, toma tus precauciones y continúa alojando a personas y contribuyendo a sus historias.