Gastos deducibles en el alquiler de vivienda amueblada

Descubre los diferentes tipos de gastos deducibles en el alquiler de vivienda, tanto en alquileres a largo plazo como en alquileres turísticos.
Por
Minut
en
Consejos de hospedaje
__wf_reserved_heredar
September 4, 2024
__wf_reserved_heredar
6
min
Gastos deducibles en el alquiler de vivienda amueblada

Alquilar una vivienda amueblada ofrece varias ventajas fiscales para los propietarios, especialmente en lo que respecta a los gastos deducibles. Conocer y aprovechar estas deducciones es clave para optimizar la rentabilidad de la inversión y cumplir con las obligaciones fiscales de manera eficiente. 

En este artículo, exploraremos en detalle los diferentes tipos de gastos que se pueden deducir, tanto en alquileres a largo plazo como en alquileres turísticos, y cómo puedes asegurarte de aprovechar al máximo estas ventajas fiscales.

Diferencias fiscales y deducciones según el tipo de alquiler

Cuando se trata de alquiler a corto o largo plazo, los propietarios deben considerar las diferencias fiscales que pueden afectar significativamente la rentabilidad. Cada modalidad tiene sus propias implicaciones y oportunidades de deducción fiscal que deben evaluarse cuidadosamente.

Diferencias fiscales entre alquiler a largo plazo y turístico

El alquiler a largo plazo implica declarar los ingresos como rendimientos del capital inmobiliario, permitiendo deducciones por gastos de reparación y mantenimiento, así como una reducción del 60% de los ingresos netos cuando la vivienda es la residencia habitual del inquilino. 

En contraste, el alquiler turístico a corto plazo se declara como rendimientos de actividades económicas si se prestan servicios adicionales. Aunque ofrece deducciones más amplias, como gastos de marketing y servicios de limpieza, no se beneficia de la reducción del 60% en los ingresos netos.

Implicaciones y deducciones fiscales según el tipo de alquiler

En el alquiler a largo plazo, se pueden deducir gastos como reparaciones, intereses hipotecarios, y se aplica la reducción del 60% en los ingresos netos. 

Por otro lado, en el alquiler turístico a corto plazo, se permite la deducción de gastos de publicidad, servicios adicionales como limpieza, y la posibilidad de amortizar el inmueble y mobiliario, lo que reduce la base imponible.

Gastos de reparación y conservación

El mantenimiento y la conservación de una vivienda alquilada son esenciales para garantizar su habitabilidad y atractivo para los inquilinos. Los propietarios que alquilan sus viviendas amuebladas pueden beneficiarse de la deducción de ciertos gastos relacionados con las reformas y reparaciones menores necesarias para mantener la propiedad en buen estado.

Reformas y reparaciones menores

Los gastos deducibles en la declaración de la renta incluyen las reformas y reparaciones que son necesarias para mantener la funcionalidad y seguridad de la vivienda. Estas incluyen la pintura de paredes, la reparación de instalaciones eléctricas o de fontanería, y la sustitución de elementos deteriorados como ventanas o puertas. 

Es importante destacar que las reparaciones que tienen como objetivo mejorar la vivienda, más que mantenerla, no se consideran deducibles, ya que se consideran mejoras y no mantenimiento. Los propietarios deben mantener facturas y comprobantes detallados de estos gastos para poder justificarlos ante la Agencia Tributaria. Es crucial que estos gastos se declaren correctamente para evitar problemas fiscales y maximizar las deducciones disponibles.

Reemplazo de electrodomésticos y muebles

Los propietarios pueden amortizar el coste de sustitución de electrodomésticos y muebles, distribuyendo dicho coste a lo largo de su vida útil, que puede extenderse hasta 20 años. La amortización suele aplicarse a un porcentaje anual fijo del 10 %. Para beneficiarse de esta deducción, es esencial justificar el uso de estos bienes en la propiedad alquilada y mantener registros precisos de su coste y fecha de adquisición.

Suministros y servicios básicos

Los gastos relacionados con los suministros y servicios básicos de una vivienda alquilada son deducibles en la declaración de la renta, siempre que se cumplan ciertas condiciones. Estos gastos pueden incluir el coste de la luz, el agua, el gas, y otros servicios esenciales que garantizan la habitabilidad de la propiedad.

Gastos deducibles de luz, agua y gas

Los propietarios pueden deducir los gastos de luz, agua y gas si ellos asumen estos costes en una vivienda alquilada. Estos gastos no son deducibles si los inquilinos los pagan directamente. En contratos donde los servicios están incluidos en la renta o en alquileres turísticos, los propietarios pueden deducir estos costes. 

Es crucial mantener un registro detallado y facturas para justificar la deducción ante la Agencia Tributaria. Además, la deducción debe ser proporcional al tiempo que la vivienda estuvo alquilada, aplicándose únicamente a los períodos de ocupación del inquilino.

Servicios de mantenimiento y seguridad

Los propietarios pueden deducir gastos de mantenimiento y seguridad de la propiedad, como el cuidado de jardines, la limpieza de áreas comunes y la instalación de alarmas. Mantén tu propiedad segura, es fundamental para mejorar la satisfacción de los inquilinos y aumentar la rentabilidad del alquiler.

Además, reducir los riesgos y problemas relacionados con la seguridad puede minimizar las desventajas de ser anfitrión en Airbnb. Para deducir estos gastos, es crucial conservar todas las facturas y contratos que los justifiquen, asegurando que estén directamente relacionados con la vivienda alquilada.

Gastos relacionados con la financiación

Los propietarios que financian la compra de una vivienda amueblada mediante un préstamo hipotecario pueden beneficiarse de deducciones fiscales significativas. Estas deducciones pueden aplicarse tanto a los intereses hipotecarios como a otros gastos relacionados con la financiación, incluidos los seguros exigidos por la entidad bancaria.

Intereses hipotecarios y otros gastos de financiación

Los intereses pagados sobre un préstamo hipotecario utilizado para adquirir una vivienda amueblada destinada al alquiler son deducibles en la declaración de la renta. Además, otros gastos asociados con la obtención del préstamo, como las comisiones bancarias y los gastos de notaría, también pueden deducirse. 

Es importante que el propietario mantenga un registro claro de todos estos pagos y los amortice correctamente a lo largo de la vida del préstamo. Esto permite reducir la base imponible y, en consecuencia, el importe total del impuesto a pagar.

Seguro de vida y otros seguros asociados a la hipoteca

Los seguros exigidos por la entidad bancaria para la concesión de un préstamo hipotecario, como el seguro de vida o el seguro de hogar, también son deducibles en la declaración de la renta. Estos seguros están diseñados para proteger tanto al banco como al propietario en caso de fallecimiento, accidente o daños a la propiedad. 

Al igual que los intereses hipotecarios, las primas de estos seguros pueden deducirse anualmente, lo que contribuye a reducir la carga fiscal del propietario. Es crucial conservar los recibos y contratos de estos seguros para justificar la deducción ante la Agencia Tributaria.

Seguros y certificados

Los seguros y certificados relacionados con una vivienda alquilada son aspectos importantes que los propietarios deben considerar, no solo por la seguridad y cumplimiento legal, sino también por las posibles deducciones fiscales que estos gastos pueden ofrecer.

Seguro de hogar y responsabilidad civil

El seguro de hogar es esencial para proteger la vivienda contra posibles daños, y el seguro de responsabilidad civil cubre los riesgos asociados a los accidentes que puedan afectar a los inquilinos o terceros. Las primas pagadas por estos seguros son deducibles, siempre y cuando el propietario sea el responsable de pagarlas

Estas deducciones permiten reducir la base imponible y, por lo tanto, el impuesto sobre la renta a pagar. Es fundamental que el propietario conserve todos los recibos de pago de las primas de estos seguros y los declare correctamente para poder beneficiarse de estas deducciones.

Certificado energético

El certificado energético es un documento obligatorio para alquilar una vivienda en España, ya que evalúa la eficiencia energética del inmueble. Los costes asociados a la obtención de este certificado son deducibles fiscalmente. Esta deducción se incluye en el apartado de "otros gastos fiscalmente deducibles" en la declaración de la renta. 

Al igual que con otros gastos deducibles, es necesario que el propietario conserve la factura del certificado y que esté a su nombre para poder justificar la deducción ante la Agencia Tributaria.

Impuestos y tasas

Los propietarios de viviendas alquiladas deben hacer frente a una serie de impuestos y tasas locales, que pueden suponer una carga significativa. Sin embargo, muchos de estos gastos son deducibles, lo que permite reducir el importe total a pagar por el alquiler de la propiedad.

Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI)

El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) es un impuesto local que se aplica a la propiedad de bienes inmuebles en España. Este impuesto es obligatorio para todos los propietarios, independientemente de si la propiedad está alquilada o no. Sin embargo, cuando una vivienda está alquilada, el propietario puede deducir el importe del IBI en su declaración de la renta. 

Esta deducción es posible porque el IBI se considera un gasto necesario para la obtención de los ingresos por alquiler. Para beneficiarse de esta deducción, es fundamental que el propietario conserve el recibo de pago del IBI y lo incluya en su declaración fiscal de forma correcta.

Tasas de basuras, alcantarillado y alumbrado

Además del IBI, los propietarios también están obligados a pagar varias tasas locales relacionadas con los servicios públicos, como la recogida de basuras, el alcantarillado y el alumbrado público. Estos gastos también son deducibles en la declaración de la renta, siempre y cuando el propietario sea responsable de su pago. 

La deducción de estas tasas se justifica porque son gastos necesarios para mantener la vivienda en condiciones habitables para los inquilinos. Como con el IBI, es esencial que el propietario conserve todas las facturas y recibos de pago de estas tasas para poder justificarlas ante la Agencia Tributaria y así reducir su base imponible.

Servicios profesionales y agencias inmobiliarias

La gestión de una propiedad alquilada puede requerir la contratación de servicios profesionales y agencias inmobiliarias para asegurar una administración eficiente y libre de problemas. Estos servicios generan gastos que, en muchos casos, son deducibles fiscalmente, lo que permite a los propietarios reducir la carga impositiva.

Gastos de administración y gestoría

Los honorarios pagados a empresas de administración o gestorías por la gestión de una propiedad alquilada son deducibles en la declaración de la renta. Estos gastos incluyen servicios como la gestión de cobros, redacción de contratos, y asesoría fiscal. Al ser servicios necesarios para la administración efectiva del alquiler, se consideran gastos deducibles. 

Para justificar estas deducciones ante la Agencia Tributaria, es crucial que el propietario conserve facturas detalladas y registros de todos los pagos realizados a estos profesionales, asegurando que estén claramente vinculados a la gestión de la propiedad.

Comisión de la agencia inmobiliaria

Las comisiones pagadas a una agencia inmobiliaria por la gestión del alquiler de una vivienda son deducibles fiscalmente. Estas comisiones suelen incluir el coste de encontrar inquilinos, negociar contratos, y gestionar los cobros. 

Al tratarse de un gasto necesario para generar ingresos por alquiler, el propietario puede deducir estas comisiones en su declaración de la renta. Es esencial que el propietario guarde todas las facturas y recibos emitidos por la agencia inmobiliaria para justificar las deducciones ante la Agencia Tributaria, optimizando así la rentabilidad de su inversión.

Gastos específicos de alquiler turístico

El alquiler turístico conlleva una serie de gastos específicos que son fundamentales para atraer a los huéspedes y mantener la propiedad en condiciones óptimas. Estos gastos, al estar directamente relacionados con la actividad de alquiler, son deducibles en la declaración de la renta, lo que permite a los propietarios maximizar su rentabilidad.

Gastos de marketing y publicidad

Los gastos en marketing y publicidad para promocionar una propiedad de alquiler turístico son deducibles fiscalmente. Esto incluye costos asociados con campañas de publicidad en línea, publicaciones en redes sociales, y listados en plataformas de alquiler como Airbnb. 

Estos gastos son esenciales para atraer turistas y mantener un flujo constante de reservas, lo que justifica su deducción en la declaración de la renta. Los propietarios deben conservar todas las facturas y comprobantes relacionados con estas actividades publicitarias para justificar estas deducciones ante la Agencia Tributaria, asegurando que estos gastos se reflejen correctamente en su declaración fiscal.

Servicios de limpieza y lavandería

Los servicios de limpieza y lavandería son cruciales para mantener un estándar de calidad en las propiedades de alquiler turístico, especialmente entre estancias de distintos huéspedes. Estos gastos, al estar directamente relacionados con la operación del alquiler turístico, son deducibles en la declaración de la renta.

Esto incluye tanto el coste de contratar a una empresa de limpieza como el gasto en productos de limpieza y lavandería. Al igual que con otros gastos deducibles, es importante que el propietario mantenga un registro detallado de todos los pagos y facturas para poder justificar estas deducciones ante la Agencia Tributaria.

Para concluir 

Maximizar las deducciones fiscales en el alquiler de una vivienda amueblada es clave para optimizar la rentabilidad. Mantener una buena organización y cumplir con los requisitos fiscales es esencial para aprovechar estas ventajas.

Si quieres evitar costes imprevistos, los productos Minut pueden ayudarte a proteger tu propiedad de manera efectiva. Con sus sensores de ruido, puedes detectar fiestas no autorizadas y actuar antes de que se produzcan daños o surjan problemas con el vecindario.